Qué es el pastel de calabacín
Hay quien dice que si estallara una guerra y no tuviéramos suficiente comida, el humilde calabacín podría salvar el día. Son fáciles y, además, el calabacín es un claro aspirante al récord de velocidad del mundo de las verduras. Si añadimos sus virtudes saludables, entenderemos por qué el calabacín podría ayudarnos en nuestra hora de necesidad.
El calabacín: el coche de carreras del mundo de las verduras. Estas plantas crecen muy rápido. Siembra unas semillas hoy mismo y podrás recoger tu cosecha en unos 45 o 55 días. Estos tipos son prolíficos. En algunos lugares del mundo las plantan en los coches de otras personas, o las ponen en la puerta de su vecino. Se llevan sacos de ellos al trabajo junto con recetas de pan de calabacín, cazuela de calabacín y calabacines a la parrilla. Incluso los utilizan como bates de béisbol porque no tienen ni idea de cómo utilizar sus abundantes cosechas de calabacines.
El nombre científico del calabacín es Cucurbita pepo, y pertenece a la misma familia que los pepinos y los melones. Los habitantes de América Central y del Sur comen calabacines desde hace varios miles de años, pero el calabacín que conocemos hoy es una variedad de calabaza de verano desarrollada en Italia.
Calabacín amarillo
El calabacín (/zuːˈkiːni/ (escuchar); plural: calabacines o zucchinis),[1] calabacín (/kʊərˈʒɛt/; plural: calabacín) o calabacita (Cucurbita pepo)[2] es un calabacín de verano, una planta herbácea enredadera cuyos frutos se recogen cuando sus semillas inmaduras y su epicarpio (corteza) están todavía blandos y son comestibles. Está estrechamente relacionada, pero no es idéntica, con el calabacín; su fruto puede llamarse calabacín cuando está maduro[3][4][5] Calabacín dorado cultivado en los Países Bajos para su venta en un supermercado de Montpellier, Francia, en abril de 2013
Los calabacines ordinarios son de cualquier tono de verde, aunque el calabacín dorado es de color amarillo intenso o naranja[6] En su madurez, pueden llegar a medir casi un metro de largo, pero normalmente se cosechan a unos 15-25 cm[7].
En botánica, el fruto del calabacín es un pepo, una baya (el ovario hinchado de la flor del calabacín) con un epicarpio endurecido. En la cocina, es una hortaliza, generalmente cocida y consumida como plato salado o de acompañamiento.
En ocasiones, los calabacines contienen cucurbitacinas tóxicas que los hacen extremadamente amargos y provocan graves trastornos gastrointestinales. Las causas son las condiciones de cultivo estresadas y la polinización cruzada con calabazas ornamentales.
Recetas con calabacines
Es esa época del año en la que los jardineros recogen de repente enormes cosechas de calabacines, a veces de una sola planta. Casi todas las personas que conozco que tienen un huerto me han ofrecido esta calabaza verde y larga de verano. Conozco a alguien que compró media acción en una CSA (Agricultura Patrocinada por la Comunidad) y ha conseguido calabacines cada vez que recoge su bolsa de frutas y verduras. No me desagrada el calabacín; es una verdura relativamente inocua. No tiene mucho sabor y, si se recoge cuando es joven y mide entre 15 y 20 centímetros, se pueden hacer sabrosos platos de acompañamiento con esta calabaza de verano. ¿Cuál es la historia de esta verdura tan abundante?
El calabacín tiene su origen en Mesoamérica (la parte de Norteamérica que se extiende desde el centro de México hasta Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y el norte de Costa Rica). Forma parte de un gran número de verduras y frutas originarias de América del Norte y del Sur e introducidas en la cocina del “Viejo Mundo” tras el viaje de Colón en 1492, entre ellas el maíz, las judías, la calabaza, el cacao, la vainilla, las patatas, los tomates y los pimientos.
Proteínas del calabacín
El calabacín es una calabaza de verano que tiene su origen en América. Se consume crudo y puede encontrarse en variantes verdes o amarillas. El calabacín es bajo en calorías y por lo tanto es útil para curar la obesidad y los niveles altos de colesterol. Esto lo convierte en un alimento extremadamente beneficioso en la dieta de los pacientes diabéticos. Veamos algunos beneficios del calabacín para los diabéticos de tipo 2.
Tiene el equilibrio adecuado de vitaminas y minerales y puede saciar las punzadas de hambre. La presencia de grasas saturadas y sodio es muy baja y, por lo tanto, es una buena opción para aquellos que buscan reducir la presión arterial.
Tiene vitaminas A, B, C, E y K, calcio, magnesio, potasio, zinc, fibras alimentarias y folatos. Se puede consumir tanto en forma de fruta como de ensalada o zumo. El betacaroteno presente lo convierte en un buen antioxidante.
Se ha comprobado que el calabacín es eficaz en el tratamiento de la diabetes, especialmente la de tipo 2. La presencia de magnesio y zinc descompone el azúcar en el organismo. Es rico en fibra y añadirlo a la lista de alimentos para controlar la diabetes puede contribuir en gran medida a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre.