Estómago de yogur
[Total: 11 Media: 3,2]El yogur, favorito tanto de niños como de adultos, se considera un superalimento porque tiene innumerables beneficios para la salud. El yogur es rico en nutrientes. Es una increíble fuente de proteínas y calcio. También contiene vitaminas del complejo B, fósforo, potasio y magnesio. Mejora el metabolismo y proporciona sensación de saciedad.
Elaborada a partir de la fermentación bacteriana de la leche, es este mismo proceso el que le confiere propiedades beneficiosas. Para elaborar el yogur se utilizan probióticos como el Lactobacillus bulgaricus y el Streptococcus thermophilus. Fermentan la leche y convierten la lactosa de la leche en ácido láctico.
El ácido láctico así producido coagula las proteínas presentes en la leche, dándole así una textura espesa y un sabor agrio. El yogur así obtenido puede disfrutarse tal cual, o endulzado o aromatizado con frutas, según se prefiera. Se puede añadir yogur a una gran variedad de platos o hacer batidos con él.
La diferencia entre la cuajada y el yogur es sutil, ya que ambos son productos lácteos elaborados con métodos algo similares. En el yogur, se añaden bacterias para fermentar la leche, produciendo ácido láctico que da al yogur su textura y sabor picante. La cuajada, en cambio, se elabora añadiendo a la leche sustancias ácidas como el zumo de limón, el vinagre o el cuajo, lo que provoca su coagulación o cuajado.
Yogur griego descremado
Mientras que el yogur normal suele tener menos calorías y más calcio, el griego tiene más proteínas y menos azúcar, además de una consistencia mucho más espesa. Ambos tipos contienen probióticos y favorecen la digestión, la pérdida de peso y la salud del corazón.
El yogur griego es otra excelente fuente de proteínas para comer por la mañana. El yogur griego es espeso y cremoso y contiene más proteínas que el yogur normal colado. El yogur griego también es rico en calcio y contiene probióticos que ayudan a mantener un intestino y un sistema inmunitario sanos.
Yogur y kéfir Muchos productos lácteos, como el yogur y el kéfir, contienen microorganismos conocidos como probióticos. Los probióticos suelen denominarse bacterias “buenas”, y pueden ayudar a mejorar la salud intestinal y a ablandar las heces.
Cultivos vivos y activos en el yogur La etiqueta del envase le indicará qué probióticos contiene el yogur. Algunos yogures llevan el sello de la Asociación Nacional del Yogur (NYA) “Cultivos vivos y activos”, pero si esa etiqueta no está en el envase, mira el panel de ingredientes.
Los investigadores descubrieron que los adultos obesos que comieron tres porciones de yogur sin grasa al día como parte de una dieta reducida en calorías perdieron un 22% más de peso y un 61% más de grasa corporal que los que simplemente redujeron las calorías y no consumieron calcio. Los consumidores de yogur también perdieron un 81% más de grasa en la zona del estómago que los que no comían yogur.
Yogur griego
Pero las ventajas de este producto no acaban aquí. También nos ayuda a mejorar nuestra salud. Y no se trata sólo de una observación nuestra. Estos beneficios están respaldados por la ciencia. Así que veamos por qué todo el mundo debería beber yogur todos los días.
El yogur blanco natural contiene casi toda la lista de nutrientes que el cuerpo humano necesita a diario. Bebiendo sólo una taza de este producto lácteo se cubre la mitad de las necesidades diarias de calcio. Además, contiene un conjunto de vitaminas del grupo B que te protegen de las enfermedades del corazón. El fósforo, el magnesio y el potasio que consumes con el yogur ayudan a regular la presión arterial y el metabolismo. El único nutriente vital que no contiene este producto es la vitamina D. Por ello, muchos fabricantes suelen añadirla al yogur durante su producción.
Hoy en día todo el mundo se vuelve loco por las proteínas. Desde que los científicos descubrieron que este componente desempeña un papel crucial en la regulación del metabolismo y el apetito, todos intentamos consumir la mayor cantidad posible. El yogur está repleto de proteínas. Por eso nos sentimos llenos muy rápidamente al beberlo. Durante los estudios, los científicos dividieron a los sujetos en dos grupos. El primero merendó yogur, el segundo – algún alimento bajo en proteínas. Después de la merienda todos cenaron. Los sujetos del primer grupo consumieron 100 calorías menos que los del segundo.
Yogur bajo en grasa
Estudios científicos realizados en Turquía demuestran que sólo 35 de cada 100 turcos consumen yogur con regularidad. Si eres uno de los que no comen yogur, te recomiendo que le abras un hueco en tu estómago. Quiero compartir algunos datos científicos sobre el yogur para animarte a incluirlo en tu dieta.
1 El yogur actúa como un antídoto mientras estás usando antibióticos: Debes tener en cuenta que siempre que estés usando antibióticos; el yogur se convierte en uno de los alimentos más importantes de tu dieta. Aunque los antibióticos destruyen las bacterias que causan enfermedades mientras estás enfermo, también hacen que las bacterias benignas mueran. Si quieres evitar los efectos secundarios de los antibióticos no debes olvidarte de consumir yogur.
2 Activa la producción de vitamina B: Nuestro cuerpo apenas puede producir vitaminas por sí mismo. Sólo las vitaminas B y K se producen a través de una reacción biológica en nuestros intestinos. Las personas que consumen regularmente yogur ayudan a su cuerpo a producir vitamina B en los intestinos. La vitamina B regula el equilibrio energético del cuerpo, a la vez que le protege de las enfermedades neuronales y autoinmunes. Para desencadenar este beneficio mágico del yogur, debes consumirlo con su agua; así que te recomiendo que compres yogur normal en lugar de yogur colado.